||  BIJIN SENSEI   ||

     Por: Maeda Ai
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                                   .:: Capítulo 18 ::.

------- ☆ ADVERTENCIA ☆ -------
Este fic contiene "relaciones NO APROPIADAS". Ésta es solo una historia ficticia, con personajes ficticios, que NO debe pasar más allá de la lectura.
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* ¿Qué?, tampoco hoy?. *


Rukia apretó el teléfono con más fuerza. Ichigo la había llamado para cancelar sus planes. . . ¡ otra vez !.
Con este ya era el cuarto fin de semana; ¡ no habían estado juntos en un mes !.


* Te prometo que el próximo fin de semana estaré contigo. *


Le dijo Kurosaki, al otro lado de la línea.


* Claro. * _La voz de la pelinegra sonó despreocupada, incluso animada, pero lo cierto es que estaba furiosa._ * Nos vemos entonces. *


Al finalizar la llamada, el enojo se convirtió en decepción.


""Así que finalmente pasó. . . . se aburrió de mí !.""


Pensó ella; en su lindo rostro la decepción dio paso a la tristeza.


* Dijiste que me amabas. *


Susurró para sí, en la soledad de su casa.
Kuchiki sabía que su relación con el pelinaranja no tenía futuro, pero creía que Ichigo no era el tipo de chico que dice cosas que en realidad no siente, o que tiene sexo con su profesora tan solo para ganar experiencia y luego aplicar lo aprendido con chicas de su edad.


* Al parecer me equivoqué. *


Dijo. . . así misma, a nadie. Luego frunció el ceño y se forzó a no llorar de humillación, coraje, tristeza o lo que fuese que oprimía su corazón.


Rukia fue a su pequeño estudio y se concentró en todo el trabajo que tenía pendiente, obligándose a no pensar en Kurosaki.
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La semana fue difícil, pues todos los días veía al pelinaranja y era imposible tratar de evitarlo.
En ese momento ella agradecía el acuerdo al que había llegado con él de no estar cerca durante las horas de clase. Y aunque fue duro, el trabajo la ayudó a distraerse. Aunque no sabía cómo iba a sobrevivir el siguiente fin de semana.

Por eso fue una sorpresa cuando Ichigo llegó a su casa el viernes.


* ¿Qué haces aquí?. *

* Te prometí que estaríamos juntos este fin de semana. *

* Sinceramente no te creí. *

* ¡¿Qué?!, por qué?!. *


Rukia desvió la mirada. No quería decirle que ella ya había dado por terminada su relación con él, pero así era. En cambio no pudo ocultar lo que imaginaba.


* Supongo que tu cita canceló a última hora, ¿no?. *


El pelinaranja la miró confundido, luego sonrió al entender aquella acusación.


* Estás celosa. *

* Por favor. Ya era hora de que salieras con chicas de tu edad. Eres libre de estar con la mujer que tú quieras. *

* Tienes razón, por eso ya elegí con quien quiero estar. *

* Ah, sí?. *


Kuchiki estaba furiosa. ¿A caso ese bastardo había ido a decirle quien la había desplazado?. Si el imbécil se atrevía, no dudaría en echarlo a patadas de su casa.
Pero Rukia no esperó la confesión del chico. . .


* La mujer con la que quiero estar es una enana mandona, de hermosos ojos violeta, que por cierto es mayor que yo. Aunque la edad no tiene nada que ver. . . la verdad es que, si ella tuviese mi edad, igual estaría loco por ella. . . o si fuese diez años menor que yo, la esperaría hasta que tuviese la edad suficiente para decidir si quiere estar o no conmigo. *


La pelinegra frunció el ceño. Le gustaría creer en las palabras de Kurosaki, pero. . .


* Entonces, ¿por qué cancelaste todas nuestras citas del último mes?. *

* Fue una tortura no estar contigo !. * _Le dijo él; acercándose a su profesora hasta rodearla con sus brazos._ * Pero había estado trabajando para ahorrar dinero y comprarte algo. *


Rukia lo miró con sorpresa, luego torció las cejas con pesar. Y ella que había pensado lo peor de él.


* Ichigo, no tienes que darme nada, ¡ yo solo quiero estar contigo !. *


El amplia sonrisa del joven iluminó su atractivo rostro. Las palabras de la ojivioleta lo hacían muy feliz y además marcaban el momento perfecto para entregarle su regalo.


El pelinaranja sacó una cajita del bolsillo de su pantalón. Rukia lo miró sorprendida. No podía ser lo que imaginaba, ¿verdad?, tenía que ser otra cosa.
Pero Ichigo abrió la cajita, que contenía un sencillo pero hermoso anillo con un pequeño diamante.


* I-Ichigo, qué?!!. . . *

* Rukia. . . ¡ cásate conmigo !. *


La pelinegra se asustó y se alejó del chico.
Esto no podía estar pasando. ¿Por qué las cosas tenían que complicarse tanto?. Ya no sabía si prefería la idea de que Ichigo la cambiase por una jovencita. . . ¿por qué siempre se equivocaba con él?


* No podemos, yo. . . *

* Rukia, mírame !. *

* No !, mírame tu a mí !!. Ichigo, soy mayor que tú. . . y tú eres muy joven. Sin mencionar, claro, que soy tu profesora. *


Kurosaki la miraba en silencio, pero nada de lo que ella decía lo haría desistir. Él sabía lo que quería en la vida. . . y quería a esa mujer a su lado. . . por siempre.


* Bien, ahora escúchame tú a mí. No te digo que nos casemos hoy, mañana o el mes que viene. Con este anillo. . . quiero que hagamos la promesa de que algún día, en el futuro. . . nos sacaremos !. *


Rukia lo miraba aun asustada, pero también con un brillo en los ojos por aquellas palabras. Y él la miraba. . . tan decidido.


""Dios, ¿por qué nunca puedo negarme a sus locos deseos?.""


Se preguntó la pelinegra, aceptando ante sí misma que no podía negarse a algo que ella también deseaba con todas sus fuerzas.


""Algún día.""


Pensó ella.


* Tú sabes que te amo, enana. * _Decía Ichigo; sus ojos brillando con intensidad._ * Además, con el anillo todos sabrán que le perteneces a otro y no les quedará más remedio que rendirse. *

* ¿Le pertenezco?. *

* Por supuesto. Tú eres mía. . . y yo soy totalmente tuyo !. *


Ella sonrió, acercándose nuevamente a él.


* ¿Y si el anillo no impide que otros hombres quieran seducirme?. *

* Entonces tendré que partirles la cara por tratar de quitarme a mi prometida. *

* Baka. *


Susurró ella, poniéndose de puntitas para besarlo.


* Rukia. *

* Mmm. *


Se decían entre besos.


* Cásate conmigo. *

* Sí. . . sí !. *


Separaron sus bocas y se miraron fijamente. Entonces, Ichigo sacó el anillo, tomó la mano de la pelinegra y deslizó el anillo en su dedo.


* Mía !. * _Susurró él._ * ¡ Mía !. *


Volvió a decir, ahora con voz más fuerte.
Estrechó la mano de la pelinegra y prácticamente corrieron a la habitación entre risas de felicidad.

Ya en la recamara de Rukia, volvieron a besarse mientras se quitaban la ropa. Un beso, una prenda. Otro beso, otra prenda. . . Y así hasta quedar totalmente desnudos frente al otro.

Kuchiki se estremeció ante la forma en que el muchacho la miraba. Aquellos ojos miel desbordaban deseo y lujuria, pero por encima de esas emociones, la miraba embelesado. Los ojos de Ichigo estaban llenos de amor. Y ahora con un sentimiento de posesión mucho más fuerte, pues ella estaba desnuda frente a él, solo con el anillo que él le dio.


Se sonrieron el uno al otro, luego ella bajó la mirada y sonrió traviesa al ver la verga del chico, ya totalmente dura.


* E, el condón. *

* Matte !. * _Lo detuvo ella._ * No lo necesitamos esta vez. *


Decía la ojivioleta; dando un par de golpecitos en la nariz de Kurosaki. Y ese simple contacto lo excitó; su verga dio un tirón, poniéndose más dura.

Ichigo la estrechó entre sus brazos, recostándola sobre la cama y cubriendo a Rukia con su cuerpo. Adoraba estar así con la pelinegra, porque así él podía protegerla. . . y ella no podía escapar de él.

El chico sacudió la cabeza ligeramente; ahora solo importaba hacerle el amor a esa mujer. El pelinaranja no esperó más, separó las piernas de su profesora y frotó la punta de su pene en la entrada del sexo femenino.


* Estás mojada !. *


Le dijo él, sorprendido y agradado.


* Te deseo mucho. . . te quiero dentro de mí, ya !. *


Le decía ella, mientras ondulaba las caderas, creando fricción entre su sexo y el de Kurosaki, pero ya no soportaba más, así que Rukia rodeó la verga del joven con su mano y la guio a su vagina.
Ichigo se dejó llevar, clavándose lentamente en su profesora.


* E-estás muy duro, mmm !. *

* Ahh !, y tu muy a, apretada. *


Ambos se sonrieron para luego abrazarse estrechamente, anhelando que ni un solo centímetro los separase.
Permanecieron quietos, sintiéndose, tocándose. Rukia acariciaba la espalda de Kurosaki, haciéndolo estremecer.


* I, Ichi !!. . . *


Ella gimió en el oído del muchacho, quien ya no se pudo contener y comenzó a agitar las caderas, sacando y metiendo la verga del cálido y cómodo interior de su profesora, cuyos gemidos y jadeos lo encendían y lo hacían moverse cada vez más rápido y penetrarla con más fuerza.


* I-Ichigo, más !!. . . *


Y Kurosaki la complacía, penetrándola con fuerza.


* Es delicioso moverme dentro de ti, ahh !. E, eres tan suave, aahhh !!. *

Le decía él, sin dejar de embestirla.
Rukia se arqueó mientras separaba totalmente las piernas para que el pelinaranja entrara en su cuerpo lo más profundo posible. El chico le sostuvo las piernas sin dejar de meter y sacar su pene.


* E-enana, aahhh !!. *


Kurosaki apretó los dientes, tratando de soportar el placer de su verga aferrada por el sexo de la ojivioleta, quien solo podía pensar en disfrutar de ese hombre y de su duro pene, que parecía incansable y seguía clavándose en ella.

Ichigo sentía como la vagina de su profesora se estaba haciendo más y más estrecha, apretando su pene con más fuerza a cada embestida, negándose a soltarlo, como si no quisiera dejarlo ir. Recibiendo sus embestidas, llena de placer.


* Ru, Rukia !. *


Él la llamaba, al borde del éxtasis, mientras la pelinegra se arqueaba y se mordía un puño; la verga del pelinaranja golpeaba intensa y constantemente el punto más profundo y sensible de su vagina, así que ya no pudo más...


* Te amo !. * _Ichigo le susurró al oído._ * Te amo !!. *


Y volvió decirle con voz más fuerte.
Rukia lo apretó con más fuerza cuando escuchó esas palabras. Ichigo siguió diciéndole que la amaba. Y cada vez que lo decía, la vagina de la pelinegra le apretaba más fuerte la verga.

Kurosaki sonrió ante aquella reacción, así que siguió diciéndole una y otra vez que la amaba, deleitándose porque la vagina de Rukia estaba cada vez más estrecha. Era, una especie de ciclo; palabras de amor, embestida.


* Te amo. *


Embestida.


* Ahh !. *

* Te, te amo !!. *


Otra embestida.


* Ichigooo !!. *


Y luego, un delicioso escozor en su interior terminó por convertirse en un fuerte orgasmo.
Las contracciones de Kuchiki vencieron totalmente al chico, lanzándolo al abismo del placer. Ichigo arqueó la espalda, clavándose en lo más profundo de la vagina de su profesora, llenándola con su semen mientras le gritaba que la ama.

Y esas palabras más la abundante venida del muchacho, desencadenaron un nuevo orgasmo para la pelinegra; el más intenso de su vida. Su vagina oprimiendo con todas sus fuerzas la verga del pelinaranja, ordeñándolo.


Momentos después, cuando sus respiraciones se tranquilizaron un poco, aun yacían uno en brazos del otro, acariciándose.
Ichigo aun clavado en el interior de Rukia, aunque su pene ya no tan duro. . . su semen escurriendo entre las piernas de la ojivioleta.

Rukia le acarició la mejilla; él le tomó la mano y la besó, primero la palma, luego cada uno de los dedos y finalmente el anillo.


* Te amo !. *


Le dijo él, mirándola fijamente.


* No sigas por favor. *


Le pidió ella, totalmente roja por la vergüenza, provocando una carcajada del pelinaranja, pues sabía que había descubierto un estimulante que su profesora no podía resistir. E Ichigo estaba dispuesto a usarlo a favor del gozo de ambos y enloquecerla de placer.
Con solo decirle que la amaba, la haría venirse una y otra vez. Pero ya habría tiempo más adelante, por ahora él solo quería tenerla entre sus brazos.


Así, Ichigo entrelazó los dedos con los de la pelinegra, mirando el anillo.


* Un símbolo de una promesa. . . algún día. *

* Sí, algún día. *


Dijo ella, mirando el anillo. . . y sonrió.
También era una promesa con ella misma. . . pues algún día le diría sus sentimientos a Ichigo.



Sin finalizar.

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Un paso más. . . comprometidos. Esta relación ichiruki se hace más y más intensa con cada capítulo ^v^.

Y aunque no lo dijo, Rukia planea decirle sus sentimientos a Kurosaki 7w7 .

Por cierto. . . ¿dónde trabajó Ichigo?.
Pues en la tienda de Urahara, todos los fines de semana, por eso no podía estar con su enana. Pero. . .
Cuando me di cuenta, no incluí esa información en el fic. Y al final lo dejé así ¬¬' .

¿Qué locuras pasarán en el siguiente capítulo?. Así es LO-CU-RAS !!.

_I LOVE ICHIRUKI_

~*~

Este fanfiction fue escrito por Maeda Ai.

Y es material de Paradise

Si llegan a encontrar una historia similar a esta (con los mismos diálogos y situaciones), o con el nombre de otro autor(a), será sin mi consentimiento y por tanto un engaño.


Totalizado el 06 de Mayo de 2020.


La dama del Hentai: Maeda Ai

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