||  ELLA ES. . .   ||

     Por: Maeda Ai
. . . . . . . . . . .
         .:: Capítulo 1: Mirándola en silencio ::.



La mujer de ojos violeta entró en la habitación de aquel lujoso hotel.
Con pereza, con fastidio, Rukia se dejó caer sobre una de las dos camas que ocupaban la recamara. No podía creer que se dejara convencer por su amiga de cabellos naranja.


* Debí suponer que pasaría algo así. *


Sus palabras, casi un suspiro.
Giró sobre la cama hasta quedar sobre su costado derecho; conocía a Orihime desde hacía ya varios años. Si ya sabía que le haría algo así, ¿por qué no se negó?.


""Date un par de semanas para descansar. . . vamos a la playa, las montañas. Donde tú quieras. . .""


Recordó las exactas palabras de su amiga.
La playa fue la decisión; creyó que serían solo Orihime y ella, pero no. . .


*Tenía que invitar a su hermano y su novio.*


Era obvio que la idea no le agradaba, Rukia quería distraerse un poco, pero la presencia de esos dos, en especial la del pelinaranja, le resultaba incómoda.

Más incómodo fue viajar con ellos en la camioneta durante tres largas horas. Orihime y su novio, Ishida, iban al frente conversando de esto y de aquello; Rukia e Ichigo en el asiento trasero.
A pesar de ser amiga de Orihime por más de ocho años, nunca se llevó muy bien con el hermano de ésta, quizá por eso fue que lo ignoró durante todo el camino.

Ahora suponía que las dos semanas de supuesto descanso no le servirían de nada; seguro se pasaría la mayor parte del tiempo encerrada en esa habitación, a solas, porque Orihime se divertiría de lo lindo con Ishida.


* Creo que ella solo me utilizó como pretexto para pasar unos días con el 'señor costuritas'. *


De pronto, la joven escuchó como la puerta se abría, dejando entrar a una persona, su compañera de habitación.
Rukia no se movió en absoluto, seguía admirando el paisaje que el ventanal le permitía. . . hasta que aquella voz la sorprendió.


* Si vamos a compartir habitación, será mejor que intentemos llevarnos bien. *


Kurosaki traía consigo su equipaje y aunque su mirada parecía seria, su rostro dibujaba una imperceptible sonrisa, podía sentirlo.


* ¿Qué haces aquí?. *


Preguntó Rukia; su voz seca, seria y con claro enfado y disgusto por tenerlo cerca.
Ichigo desempacaba e iba de un lado a otro de la habitación ignorándola completamente.

¿Qué hacía ahí?, pues su hermanita simplemente le dijo que compartiría la habitación con Uryuu. Dormiría con ese bastardo, maldición, aunque fuese su mejor amigo no podía soportar siquiera pensar en que iba a pervertir a su dulce e inocente hermana.


* Sí, así es Orihime. *

* Ya lo sé, pero no me gusta en lo más mínimo que esté sola con él. *


Rukia se sentó sobre la cama, no sabía que el pelinaranja fuese un hermano celoso, aun con Ishida que era su amigo.

Pero no tenía que preocuparse, al menos ya debía estar acostumbrado, la relación de esa pareja era ya muy intima, muy, muy intima. Orihime e Ishida hacían el amor desde ya cuatro años e Ichigo todavía no se hacía a la idea de que su pequeña hermana. . . ya no es tan pequeña.


* Ahh, que le vamos a hacer !. *


Rukia dejó escapar un leve suspiro; no tenía opción, compartiría la recamara con este joven pues al parecer la menor de los Kurosaki iba a estar muy ocupada durante el resto de la noche.

Sin prestarle más atención a su compañero, la pelinegra se dirigió al cuarto de baño para cambiarse de ropas, sin percatarse de que Ichigo la seguía con la mirada fija sobre su lindo cuerpo.
Para el muchacho, fue simplemente imposible apartar la mirada de la puerta del baño, pues la mujer más hermosa que sus ojos hayan visto estaba del otro lado de dicha puerta.


""Semidesnuda, seguramente, poniéndose ropa más cómoda.""


Pensó el ojimiel, imaginando aquella suave piel blanca con pocas prendas cubriéndola.

La puerta finalmente se abrió, dejando ver a una bella joven vistiendo una pequeña bata de dormir que dejaba al descubierto sus hermosas piernas. Rukia sintió la fijeza de la mirada de su compañero de habitación; le resultó extraño, pero no pudo evitar sonrojarse sutilmente.
Ignorando el brillo en los ojos de aquel hombre, terminó recostándose en la otra cama.

Ella le daba la espalda; las delgadas sábanas cubrían casi todo su cuerpo, delineándolo sensualmente.

Ichigo aún mantenía los ojos fijos sobre aquella mujer. . . tantos años de conocerla, tantos años tratando inútilmente de dejar de pensar en ella y ahora era lo más cerca que había estado de Rukia.

Como deseaba tener su fina figura entre sus brazos, que su exquisito aroma lo envolviese, profanar sus tentadores labios femeninos. Pero eso no podía ser. . . durante años tuvo que conformarse con verla de lejos, siempre de lejos; al menos ningún hombre a su lado.


""Hasta que conoció a Renji.""


Recordó, su mente torturándolo.
Cualquier esperanza que hubiese guardado se vino abajo cuando se enteró de la relación que Kuchiki tenía con el tipo pelirrojo y lleno de tatuajes.


* Pero ahora Rukia era libre de nuevo. *


Kuchiki había terminado su relación con Renji, y de nuevo, Ichigo tenía la vaga oportunidad de poder acercarse a la bella mujer, una oportunidad que su hermana le había conseguido y que ahora, mientras cerraba los ojos, estaba dispuesto a aprovechar, para que Rukia por fin le prestara un poco de atención.



Sin finalizar.

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Ichigo y Orihime. . . hermanos, ¿lo imaginaron?. Eso es mejor que el final del manga ¬¬' .

Ichigo se muere por Rukia, pero ella no está interesada, o eso parece.
Ahora solo falta que Ichigo aproveche esta oportunidad 0v0 .

_I LOVE ICHIRUKI_

~*~

Este fanfiction fue escrito por Maeda Ai.

Y es material de Paradise

Si llegan a encontrar una historia similar a esta (con los mismos diálogos y situaciones), o con el nombre de otro autor(a), será sin mi consentimiento y por tanto un engaño.


Totalizado el 03 de Junio de 2020.

Versión SK: Totalizado 03-Julio-2006.


La dama del Hentai: Maeda Ai

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